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Y no van a entrar: jefe Arteaga a los “reizer”

 Redacción/SV

El hombrón de -estimo-, 1.90 de estatura, movió uno de sus índices para, de inmediato, atajar: no, no, no…

El jefe don Juan Manuel Arteaga, secretario de Seguridad Pública del municipio de Rayones, respondía gráficamente a uno de los presentes que le interrogó directamente:

-¿Ahora sí nos va a dejar entrar? La contestación movió la risa general de diputados, funcionarios de gobiernos y propietarios de los ahora muy famosos vehículos razer o “reizer” y similares, cuya desenfrenada circulación en los municipios del todavía idílico Cañón del Huajuco, ha causado estrés en los vecinos y fauna silvestre y otros daños, como se dice, intangibles.

Pero también han causado afectaciones concretas porque, según denuncias, los conductores casi llegan “tumbando caña” en predios, bosques, ríos, cultivos y huertos.

Las declaraciones de los entrevistados evocan al reportero al guerrero de la Antigüedad, Atila, líder de los Hunos, del que se decía –sabrá dios si es cierto esto- que por donde cabalgaba no renacía la hierba. También se decía de él que era el azote de dios; vaya usted –lector- a saber.

El asunto es que los “reizer”, que no son otra cosa que vehículos tipo off road, de los que se ruedan en competencias sobre pistas rústicas o  caminos vecinales y terracerías, se han convertido no en una jaqueca sino en una migraña para los pobladores de varios municipios de Santiago y otros de la región como Rayones, donde, sin embargo, los tripulantes de los susodichos “carros” ya encontraron su horma en el jefe Arteaga que les ha puesto el alto: no, no, no…

Que no van a circular hasta que lo hagan con orden y sujetos a las leyes que protegen el derecho a la propiedad ajena, la propiedad pública, como son los ecosistemas, que le bajen a su ruido y a las luces de los farolones de los reizer que estresan al vecindario y a los animales domesticados y los silvestres. Es un rosario de reproches.

Han causado un caos, dice en entrevista la diputada Ivonne Bustos, presidenta de la Comisión del Medio Ambiente del Congreso local quien coordinó una reunión de trabajo para discutir el problema con pluralidad y amplitud para tratar de llegar a una reglamentación, la cual urge.

Y más a los dueños de los carros porque quieren ir este fin de semana a…poner gorro. Pero ahí el jefe Arteaga está firme con su índice (no, no, no) y su autoridad, y nos dice que cada fin de semana es un ruidazo porque circulan de 200 a 250 reizer conducidos por personas que residen en San Pedro, Monterrey, Allende y Santiago entre otros.

No respetan nada ni a nadie, agrega en una breve entrevista el jefe Arteaga.

La diputada Ivonne Bustos informó que la reunión en el Congreso arroja de saldo la voluntad de todas las partes involucradas en el tema a dialogar, hacer propuestas para llegar a contar con una ley dirigida a ordenar el uso, la circulación de los vehículos de la polémica, con la prioridad de que no se perjudique el medio ambiente, ni a los vecinos.

Se comentó que los reizer tienen un valor de varios cientos de miles de pesos, cercano a lo que cuesta un automóvil de verdadero lujo, con el problema de que la ostentación de lo metálico no repara en el respeto al derecho de terceros a vivir en paz.

 

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