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POLÍTICA Y GENTE

Por: Pedro García

Hablando del ejercicio de un régimen, seis años son pocos o muchos para exigir soluciones; depende del interés de cada quien.

El asunto se complica cuando el gobernante llega con la impetuosidad de quien ofreció resolver casi todo…lo que cuestionó del antecesor.

Por lo que sea, ya todo está puesto, principalmente el toro, es decir, la obligación de cumplir.

Está el escenario, es decir, el ambiente interno y externo. Lo exógeno, -ah…qué palabrita-, por lo menos no está presionando tanto, es decir las “corridas” especulatorias, las guerras intercontinentales y otros.

Sí presiona, y diario, es el compromiso de pagar intereses de la deuda.

El otro elemento es el pueblo, término que incluye a los acaudalados; no es despreciable formar parte de un pueblo. Es despreciable aislarse en un afán de tomar distancia de los problemas comunes y exigir satisfacciones particulares, en otras palabras, dar de topes y mamar leche.

La forma de gobernar de López Obrador corresponde a un estilo que está encontrando oposición de partidos y gobernantes.

Corre el segundo mes, apenas, y ya hay marcados pleitos contra el “Centro”, es decir, contra AMLO, quien está en sus ocho, concentrando esfuerzos en la contención de la inseguridad, el atajo de la corrupción y en tratar de implantar la austeridad con el ejemplo personal.

Diario, el Presidente da cuenta de la inseguridad. Escucho gobernadores y alcaldes inconformes con el tema de la Guardia Civil a pretexto de los derechos humanos pero ninguno de esos gobernantes locales rinde cuentas del estado de sus policías.

Desde que Calderón sacó a las calles a los militares, gobernadores y alcaldes pasaron a rascarse la panza y se olvidaron de renovar sus fuerzas del orden. Hay cientos de municipios que no tienen un sólo uniformado.

Ah, pero quieren su Ramo 23…Recursos que muchos recibían inclinados ante diputados federales que les cobraban comisión, “el moche”.

Despierta sospechas que gobernantes locales extrañen el Ramo 23 por medio del cual, es público y reconocido, el régimen anterior castigaba financieramente a los que se atrevían a exigir lo suyo:

El que por su gusto es buey…

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